Las personas que están en una cama sin poder moverse ni comunicarse, tienen que habituarse a una vida llena de retos que tendrán que superar. No pueden pasear, ni charlar, pero ¿quién dijo que no pudieran trabajar? Una empresa japonesa ha tratado de hacerlo realidad y lo ha conseguido dándoles puestos de camareros.
Personas completamente robotizadas
Cuando una enfermedad degenerativa o un accidente te deja el cuerpo paralizado por completo, tu destino es estar postrado en una cama el resto de tu vida. Esto significa ser dependiente de alguien todo el tiempo y tener que buscar alguna ocupación visual.
Eso es lo que han hecho Ory Lab, una startup que ha decidido innovar en la forma de trabajo. Una cafetería en Japón ha querido hacer uso de la última invención de este equipo de trabajo: un robot que permite a personas discapacitadas trabajar a distancia.
El objetivo de este proyecto es brindar una mayor independencia a las personas con discapacidad, y para ello han construido robots que parecen tener vida propia. Están monitorizados y se manejan desde el lugar donde se encuentre el enfermo.
Las pantallas que lo guían, están preparadas para atenderlas órdenes que estas personas dan con los ojos, de tal forma que solo necesitan estar despiertos. Los robots, equipados con gps y altavoz, están perfectamente preparados para hablar con los clientes y coger cosas.
La meta de esta creación es hacer que en un mundo donde todo va demasiado deprisa, las personas discapacitadas puedan integrarse en esa vida laboral. En este aspecto, Ory Lab parece haberlo conseguido y la empresa está muy satisfecha con los resultados.
Se espera que para 2020 se hayan recaudado los fondos suficientes para hacer realidad esta cafetería que ha estado de prueba dos semanas. Gracias a los grandes resultados, las personas discapacitadas podrán gozar de la libertad de trabajar que siempre han deseado.