Sabemos que los astros tienen casi que alinearse para que te toque algún premio de la lotería. Es demasiada la gente que piensa que es cuestión de suerte, pero otros prefieren asegurarse de tener un número que tengas más probabilidades de salir en el bombo. Las tradiciones y las supersticiones son muchas y las ponemos todas en práctica.
¿Boletos premiados por suerte o por tradición?
Todo el mundo tiene un número con cierto sentido en su vida y decide comprar un boleto con la misma combinación. Ese es el primer paso para tener un boleto premiado, confiar y tener esperanza en que ese número que has seleccionado, va a darte suerte.
Un número de una fecha especial
Una fecha de cumpleaños, de boda o incluso un número que te llame la atención cuando llegas a la Administración de Lotería; todos tenemos un patrón. Aunque cada uno escoja su propio número, todos tenemos ciertas costumbres y supersticiones con nuestro décimo.
Frotar el décimo
Loterías y Apuestas del Estado ha realizado una investigación acerca de las tradiciones y supersticiones que tienen los ciudadanos cuando compra un boleto. Lo que más gente hace es frotar el décimo encima de una gato, un calvo o la barriga de una embarazada.
Si se lo compra uno, mejor
Las tradiciones no tienen por qué ser las mismas dentro de la familia, sino que cada uno puede tener una forma de «darle suerte» a su boleto. Hay personas que afirman que si te regalan los boletos no tocan, por lo que son «personales e intransferibles».
Guardarse algo en la ropa
Hay personas que llevan una moneda de oro en el bolsillo, otras que prefieren llevar un alfiler en la chaqueta o una llave de hierro en algún bolsillo. Pero no todo acaba aquí: el perejil, las velas amarillas y las cintas azules o blancas, pueden ser también sinónimo de suerte.
Toque o no toque, las personas que han comprado un décimo tienen su propio ritual para que les toque. Dicen que lo último que se pierde es la esperanza y eso es lo que debemos hacer, confiar en el azar hasta la última bola del bombo.