Es la tercera vez desde que la encerraron entre rejas que Ana Julia Quezada tiene que responder ante el juez. La asesina confesa ha decidido no declarar, salvo reiterar que todo fue un accidente, y ha solicitado el cambio de prisión de Almería a Burgos.
Vuelve a defenderse del asesinato alegando que lo asfixió por accidente
El caso del asesinato del pequeño Gabriel está a punto de cerrar sus puertas y de abrirse el secreto de sumario. Tras los informes oficiales de las pruebas definitivas de toxicología, la asesina que confesó matar al «pescaíto» ha tenido que regresar al banquillo para responder al juez, pero ha dado la callada por respuesta.
El programa de Ana Rosa Quintana ha detallado los puntos más importantes e incoherentes de la breve interrogación del juez a la asesina confesa, que por tercera vez, calla y tan sólo reitera que lo mató por accidente y un «mal golpe». Los abogados de la dominicana aseguran que no hablará hasta que se destape el secreto de sumario.
Ana Julia reconoce que asfixió al pequeño Gabriel, y lo califica como un “accidente” #AR18Jn https://t.co/8o3h28woFp
— El programa de AR (@elprogramadear) June 18, 2018
Es por ello que ambas partes piden que se levante el secreto, que es absurdo tras todas las pruebas y testimonios aportados a la investigación, y que ella seguirá negando la mayor y alegando que fue un accidente en legítima defensa. Sí, en defensa de un niño de ocho años que jugaba a pintar la casa y que fue engañado y secuestrado para llegar a ese lugar.
Pocas novedades salvo el de la petición del cambio de prisión por parte de la asesina confesa de Gabriel. Los abogados han confirmado que Ana Julia querría trasladarse de las rejas de Almería a las de Burgos, ciudad en la que vivió y en la que se encontraría su hija, que por cierto, reniega de su madre y de los hechos por los que la mantienen en prisión.