La ducha es un ritual casi diario que cada persona hace de una forma diferente, pero que nadie se meta en ella, porque si no la cosa puede terminar mal. No hay nada más sagrado que la ducha y si no lo puedes hacer de la forma a la que estás acostumbrado, no terminas de sentirte limpio del todo.
Cada ser humano tiene una costumbre diferente, pero la parte del cuerpo por la que empieces revela mucho más sobre tu personalidad de lo que podrías llegar a imaginar. Solo tienes que prestar atención si quieres saber algo más sobre ti o sobre la persona con la que compartes la ducha.
¿Qué es lo primero que te lavas en la ducha?
Cara
Si lo primero que lavas es tu cara, te preocupas mucho por los 5 sentidos; olfato, vista, gusta, tacto y oído. Te preocupas mucho por cómo se te percibe y tienes mucho cuidado con tu aspecto. No sabes escuchar cosas malas sobre ti.
Pecho
Te sientes muy cómodo en tu propia piel y por eso empiezas la ducha frotándote el pecho. Eres una persona práctica y sencilla, te gusta tu independencia y la gente te admira por eso.
Partes íntimas
A diferencia de lo que puedas pensar, si lavas tus partes íntimas primero, eres una persona muy tímida. Eres introvertido y tienes baja la autoestima. Te cuesta abrirte, pero puedes hacer que tus cercanos se sientan cómodos en tu compañía.
Espalda
La espalda es el reflejo de la consciencia. Está conectada a la columna vertebral y el sistema nervioso, uno de los elementos más importantes del funcionamiento del cerebro. Eres cauteloso y reservado por naturaleza, tomas las decisiones con cuidado.
Piernas
Los pies son lo primero que lavas en la ducha y no todos los limpian a diario. Las piernas son el símbolo de fuerza de voluntad, así que al lavarlos los primeros indicas que no tienes miedo a expresar tus opciones.
Pelo
Eres muy disciplinaria y te encanta el orden, por eso lavas tu cabeza primero. La cabeza es una parte fuerte, lo que denota que tienes una opinión fuerte y firme sobre tus creencias. La puntualidad es uno de tus puntos fuertes.
Cuello y hombros
Los más trabajadores suelen lavar su cuello y la zona de los hombros primero. Los hombros se suelen cargar con facilidad y normalmente buscas descargar esa zona para seguir disfrutando del resto de la ducha. Eres un ser muy competitivo.