A la hora de hacer dieta, siempre nos dicen que, si un día a la semana queremos saltárnosla, no pasa nada. Eso es completamente cierto, de hecho, muchos nutricionistas recomiendan hacer una «comida trampa» a la semana para que nuestro cuerpo no se acostumbre a comer siempre sano y queme más calorías después.
La mayoría de nosotros, cuando llega el día de saltarse la dieta, decidimos comer todo eso que el resto de la semana no podemos probar: hamburguesas, helados, perritos calientes… Sin embargo, este tipo de alimentos no deberíamos consumirlos nunca.
Alimentos que nos gustan pero que no deberíamos comer
1- Helados
Los helados procesados como los conos de nata o los que puedes comprar en cualquier quiosco o supermercado, suelen contener una gran cantidad de grasas saturadas y azúcares. Esto hace que nuestro índice glucémico se dispare.
La mejor alternativa sería hacer tu propio helado en casa.
2- Alimentos picantes
Es cierto que el ajo y la pimienta de cayena son muy buenos para acelerar el metabolismo e incluso funcionan como antiinflamatorios, sin embargo, irritan las glándulas sudoríparas y hace que sudes bastante más de lo normal. Trata de evitarlo cuando tengas algún evento más importante si no quieres que te jueguen una mala pasada.
Si te gusta el picante y no puedes resistirte a él, añade frutos secos a tu comida, le darán un sabor picante y no te harán sudar.
3- Carne a la parrilla
Las barbacoas, sobre todo en verano, son la opción perfecta a la hora de hacer una reunión de amigos o comer en familia. Sin embargo, las carnes, tanto rojas como blancas, a la parrilla pueden ser cancerígenas.
Cuando cocinas a temperaturas tan altas, las toxinas de la carne se activan, la carne se suele quemar y todo ello forma un cóctel explosivo muy peligroso para tu salud.
En cuanto al pescado y al pollo, también debes vigilar la temperatura y el tiempo de cocción para que se conserven las propiedades del alimento y no resulten peligrosos: 145 grados para el pescado y la carne, 160 grados para las hamburguesas y el cerdo, y 165 grados para las aves de corral.
4- Mazorca de maíz
Aunque parezcan muy sanas, en realidad no lo son tanto. Por un lado, la forma de comerlas hace que los granos se queden entre los dientes, lo que a la larga puede provocar inflamación de las encías.
Pero además de eso, el maíz contiene una gran cantidad de almidón, un hidrato de carbono muy alto en calorías y bajo en vitaminas y minerales.
Como sustituto puedes optar por las palomitas de maíz, pero caseras, no de bolsa ni de microondas.
5- Perritos Calientes
La Organización Mundial de la Salud relaciona directamente el consumo de la carne procesada de las salchichas con el cáncer colorrectal. Hay pocos productos más procesados que las salchichas. De hecho, la OMS afirma que las carnes procesadas producen los mismos daños en nuestro cuerpo que el tabaco.
Escoge mejor carnes no procesadas como un filete de pollo, pescado o ternera a lo que no le hayan añadido ningún producto perjudicial para nosotros. Aún así, lo mejor es que optes por vegetales, siempre serán mejores para nuestro organismo.
6- Té helado «sin calorías»
Aunque no contengan calorías, este tipo de bebidas normalmente están edulcoradas con endulzantes artificiales que no son nada recomendables para nuestra salud. Este tipo de edulcorantes elevan nuestras ganas de dulces y desequilibrarán nuestro sistema hormonal.
Es mejor que te hagas un té casero y lo endulces con estevia pura, no las que venden en la mayoría de supermercados.
7- Cócteles
Si el alcohol de por sí ya es malo para nuestro cuerpo, los cócteles son aún peores. Además de contener alcohol, le añaden siropes, azúcares y un gran cantidad de producto que elevan nuestro índice glucémico hasta cifras alarmantes. Eso sin hablar de las calorías que ingerimos con un simple vaso de nuestro cóctel preferido.
Si quieres tomar algo con alcohol, mejor que te pidas una copa de whisky o ginebra con algún refresco, sigue sin ser sano, pero al menos no es tan perjudicial. Además, después de tomarte la copa, lo mejor que puedes hacer es beberte un vaso de agua, de esta manera evitarás deshidratarte y prevendrás la resaca del día siguiente.
