4 Formas de probar el ‘sexo duro’ que demuestran por qué a muchas mujeres les gusta tanto

Aunque parezca algo actual, el sexo duro lleva practicándose desde principios de los tiempos. Pero, ¿sabías que existen motivos concretos por los que resulta placentero y excitante? Esto es lo que dicen los expertos.

¿Por qué resulta placentero el sexo duro?

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Según la investigadora sexual Nicole Prause, una de las razones por las que a muchas mujeres les gusta esta práctica sexual se conoce como «teoría de transferencia de excitación». Lo que ocurre es que cuando les muerden, les arañan o les dan un azote, su presión arterial aumenta y su corazón se acelera en respuesta a ese dolor. Si eso ocurre durante el sexo, se interpreta como una «excitación sexual».

Otra explicación está relacionada con la «matriz del dolor» del cerebro. Según cuenta Prause dice que existen áreas del cerebro humano que responden al dolor, y estas se superponen con áreas que responden a la excitación sexual. Esta superposición podría «engañar» al cerebro, haciendo que confunda el dolor y el placer cuando se experimentan al mismo tiempo.

Lo que debes saber antes de practicarlo

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Aunque la espontaneidad y la sorpresa son clave en la intimidad, en el sexo duro es importante que se analicen las cosas antes de probarlo para asegurarse de que ambos se sientan seguros.

Los preliminares pueden ser un buen momento para disfrutar sobre este tipo de cosas, ya que probablemente estéis relajados y excitados. Es importante tener la mente abierta y entender que los deseos de tu pareja no tiene por qué coincidir con los tuyos ni ser fruto de experiencias pasadas.

Otro aspecto a tener en cuenta es usar una palabra de seguridad. «Siempre recomiendo el método ‘amarillo, verde y rojo’«, dice Moushumi Ghose, terapeuta matrimonial y autora de Classic Sex Positions Reinvented. «Necesitas una palabra para decir ‘para’, por supuesto, pero también es bueno tener una palabra para cuando te guste lo que está sucediendo, pero solo quieres que tu pareja baje un poco el nivel».

Cuatro formas de probarlo

Una vez que lo hayáis hablado y ambos estéis de acuerdo y hayáis establecido los límites, es hora de probar:

Tomar el control

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Cogerla y tirarla sobre la cama, por ejemplo. «A muchas mujeres con trabajos de poder, o incluso madres que siempre tienen el control de todo, necesitas dejar el cargo durante un rato», dice Ghose. «El sexo se trata de perder inhibiciones y rendirse, y a veces es más fácil rendirse cuando alguien te empuja a ello».

Bocados

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«Morder saca nuestro lado más primitivo y animal«, dice Ghose. «Comienza con el labio inferior y ve bajando, mordiendo todo su cuerpo, con cuidado al principio y aumentando la fuerza poco a poco si te dice que le gusta».

Tirar del pelo

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A algunas mujeres les gusta que les tiren ligeramente del pelo durante las relaciones sexuales porque provoca un exceso de adrenalina y endorfinas. Es importante que lo hagas con cuidado y que lo cojas cerca del cuero cabelludo, ya que desde las puntas puede ser demasiado doloroso para resultar placentero.

Azotes

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«Golpea con la palma abierta sobre la parte más carnosa y más baja del trasero», cuenta. «Cuando golpeas esa zona, se envía vibraciones a través del clítoris y todo el cuerpo se excita». Comienza con azotes suaves y ve aumentando la intensidad si le resulta excitante.

Como en cualquier otra práctica sexual, lo más importante es que resulte satisfactorio y excitante para ambos. Si es así, todo está permitido.

Imagen de portada: Family TV / ShutterstockFuente: menshealth / cosmopolitan