Tanto hombres como mujeres cometen errores en la cama. Hay algunos sin importancia que pueden pasar desapercibidos o ser incluso graciosos. Sin embargo, hay otros que pueden acabar con la excitación de la pareja.
En este caso vamos a hablar en concreto de los grandes errores que cometemos las mujeres entre las sábanas.
20 Grandes errores que cometen las mujeres en la cama
No tomar nunca la iniciativa
Quizás por educación o por prejuicios, algunas mujeres se sienten incómodas o les da miedo tomar la iniciativa. Pero a los hombres les agrada que ellas también tengan un papel activo en el encuentro.
Dar por hecho que los hombres deben llevar preservativos
Muchos hombres lo llevan para ir preparados por lo que pueda pasar. Pero no solo es cosa de ellos, también está en riesgo tu salud y un posible embarazo no deseado.
Hablar todo el rato
El sexo no tiene por qué ser silencioso, pero tampoco se trata de estar hablando de cualquier tema todo el rato. No excita nada a los hombres.
No querer probar
No tienes por qué probarlo todo, pero no dejes de hacerlo porque lo veas promiscuo o no aceptable. En la vida sexual todo vale, solo tenéis que estar de acuerdo vosotros.
Preguntar constantemente cómo están
Preguntarle todo el rato a tu pareja antes, después y durante el sexo qué tal estás físicamente puede acabar con su excitación.
Creer que los hombre solo tienen una zona erógena
Debes acariciar todo el cuerpo de tu pareja, a la mayoría no le gusta que te centres exclusivamente en sus genitales. Son una parte importante, pero no la única.
Querer siempre oscuridad
Muchas mujeres sienten vergüenza de su cuerpo y no les gusta que las vean desnudas. Sin embargo, a ellos les suele encantar contemplar el cuerpo de una mujer.
Fingir demasiado
Está permitido exagerar un poco los sonidos, o decir palabras que los incentiven; pero si es demasiado exagerado y poco creíble, el resultado será el contrario al buscado.
No cuidar la higiene
No solo tienes que hacerlo por él. Sentirte guapa, limpia y seductora ayuda a mejorar las relaciones sexuales.
Compararlo con tus ex parejas
No es buena idea comparar cosas como la duración del acto o su destreza sexual con parejas anteriores que hayas tenido. ¿A ti tampoco te gustaría, verdad?
Poner excusas para no tener sexo
Si tu pareja se insinúa y a ti no te apetece, no le digas «me duele la cabeza», suena a la típica excusa. En la pareja debe haber confianza, y es mejor decirlo claro.
Usar el sexo como premio o castigo
No utilices el no tener sexo como castigo cuando estés enfadada, y tampoco lo ofrezcas como premio. Esto puede afectar a vuestra relación. Si quieres tenerlo tenlo, y sino, dilo claramente.
Pedir más sin dejarlo descansar
Si tu pareja ha llegado al orgasmo, no pidas más de inmediato. La mayoría de los hombres necesita un tiempo de recuperación.
Morder o apretar con fuerza zonas sensibles
Las zonas erógenas se pueden volver muy sensibles al excitarse, o incluso después de eyacular. Trátalas con delicadeza, un mordisco o demasiada presión puede hacer que les sea doloroso.
Quejarse por todo
Le puedes decir lo que te gusta y lo que no, pero no te quejes por todo lo que hace, o acabarás completamente con la excitación del momento. No son adivinos.
Planear demasiado los encuentros
Si lleváis una vida muy ajetreada, guardar hueco para el sexo no tiene por qué estar mal. Pero no lo planeéis como si se tratara de cualquier actividad del hogar más, o perderá la pasión del momento.
Usar ropa interior ‘de abuela’
La comodidad es importante, pero puedes usar ropa interior sexy y cómoda a la vez. ¿Te gustaría que él llevara calzoncillos ‘de abuelo’?
No entenderlo si acaba rápido
A veces la pasión hace que no pueda contenerse y llega al clímax mucho antes que tú. No lo juzgues, ya él solo se siente suficientemente mal por ello.
Pretender qué sepa exactamente qué hacer
Cada mujer es diferente y es normal que no sepa exactamente lo que te gusta. Ayúdale a dar con tus puntos de placer.
Guiarle todo el rato
Una cosa es ayudarlo y decirle lo que te gusta, y otra no parar de darle instrucciones. No te pases, o terminará frustrado pensando que no hace nada bien.
Ahora que ya sabes cosas que posiblemente hagas mal, puedes empezar a corregirlas. ¿Sabías que a la mayoría de los hombres no le gustaban?