Como seguramente ya sabrás, un metabolismo rápido quema muchas más calorías en el mismo tiempo que uno lento. Por ello, la mayoría de personas que buscan bajar de peso o se introducen en la vida fitness, hacen todo lo posible por acelerar su metabolismo.
En el artículo de hoy te vamos a revelar 13 maneras muy efectivas de acelerar el metabolismo de manera sencilla para perder kilos incluso estando en reposo.
13 Maneras muy efectivas de acelerar tu metabolismo
1- Beber mucha agua
Bébete un vaso de agua nada más levantarte por la mañana para activar tu sistema digestivo desde primera hora.
2- Come alimentos ricos en vitaminas B
Se ha demostrado que los alimentos que contienen vitamina B juegan un papel muy importante en el metabolismo. El cuerpo necesita ayuda la ayuda de esta vitamina para convertir los carbohidratos, las proteínas y las grasas de los alimentos en energía. Las legumbres, los granos enteros y las verduras contienen mucha vitamina B.
3- Aumentar masa muscular magra
Se necesitan más calorías para mantener el músculo que la grasa, por lo que mientras más masa muscular tengamos, más rápido será nuestro metabolismo.
4- Evita la pérdida rápida de peso
La pérdida rápida de peso por ingerir poca comida o seguir dietas que están «de moda», hará que disminuya tu tasa metabólica.
5- Toma proteínas, grasas y fibra en todas las comidas
Te ayudarán a mantenerte satisfecho y a estabilizar tus niveles de azúcar en la sangre. Además, la proteína y la fibra requieren más energía para ser digeridas que los carbohidratos refinados, por lo tanto quemarás más calorías.
6- Duerme lo suficiente
La falta de sueño reduce la capacidad de tu cuerpo para quemar calorías. Además, cuando estás cansado, estás menos motivado para ir al gimnasio y entrenas peor.
7- Cuida los aperitivos
Los aperitivos y snack son la mejor manera de no pasar hambre entre horas y hacer que tu sistema digestivo esté en constante funcionamiento. De esta manera quemarás más calorías. Sin embargo, debes tener cuidado con lo que comes. Las frutas o los frutos secos son una alternativa perfecta.
8- Come chocolate negro
Buenas noticias para los amantes del chocolate: está comprobado científicamente que ayuda a perder peso. El chocolate negro es una gran fuente de polifenoles y flavanoles y mejora el metabolismo de las grasas y los carbohidratos. Además tiene un efecto saciante y te ayuda a sentirte lleno más rápido.
9- Toma probióticos
Las bacterias intestinales saludables favorecen la quema de grasa y la función metabólica. Los probióticos son beneficiosos para nuestra salud intestinal, lo que nos ayuda a tener una mejor digestión y a sentirnos menos hinchados.
10- Reduce tu estrés
El estrés crónico altera nuestras hormonas metabólicas. Se ha demostrado que los niveles elevados de la hormona principal del estrés, el cortisol, conducen a antojos de carbohidratos y azúcar. Esto, a la larga hace que subas de peso.
11- Aceite de coco
La mayoría de personas cree que el aceite de coco, al contener muchas grasas, no es recomendable si queremos perder peso. Sin embargo, las grasas del aceite de coco son muy saludables y tienen numerosos beneficios para nuestra salud.
El aceite de coco está compuesto por triglicéridos de cadena media que se metabolizan de manera diferente en el cuerpo que la mayoría de las grasas. Estos, se transfieren rápidamente del tracto digestivo al hígado y se convierten en una fuente inmediata de energía. De esta manera, quemarás más calorías y conseguirás perder peso.
12- Vinagre de sidra de manzana
Un estudio realizado en Japón en 2009 demostró que las personas que consumían vinagre de sidra de manzana todos los días perdían más peso que aquellos que no lo hacían. Además de ser rico en vitaminas y minerales esenciales como el potasio, el magnesio, la fibra, los aminoácidos y los antioxidantes, aumenta la sensación de saciedad después de las comidas.
13- Añade especias a tus comidas
Los alimentos picantes como los pimientos rojos o los jalapeños no solo aceleran el metabolismo, sino que también tienen otros beneficios para la pérdida de peso. Las personas tendemos a consumir los alimentos picantes más lentamente. De esta manera, digerimos mejor los alimentos y nos sentimos satisfechos antes de comer de más.